Uso de fajas lumbares
Tratamiento complementario en caso de dolor lumbar
Las fajas lumbares, en muchas ocasiones, se emplean como tratamiento complementario en las lesiones lumbares como el lumbago o otros problemas de columna. En muchos casos, ayudan a recuperar movilidad en la zona y alivian, de forma notable, el dolor. Sin embargo, es fundamental, que su uso esté supervisado por un especialista en columna vertebral, para evitar otro tipo de lesiones. La lumbalgia o dolor lumbar es un dolor que se produce en la región lumbar o, lo que es lo mismo, en la parte baja de la espalda.
¿Qué es una faja lumbar?
Una faja para espalda es una ayuda ortésica para la zona lumbar, el objetivo de este dispositivo es contener la zona lumbar y la región sacra de la espalda.
Normalmente, las fajas lumbares se utilizan para pacientes con dolor lumbar crónico. De esta forma, mejoran la estabilidad de la espalda aportando seguridad en los movimientos. Las fajas lumbares deben ser prescritas por un especialista.
Objetivos de una faja lumbar
El objetivo de una faja lumbar es, principalmente, la contención de la zona y la relajación de la musculatura de la espalda. Además, evita que el paciente realice movimientos que empeoren la lesión.
De esta forma, en muchas ocasiones puede aliviar el dolor, haciendo que el paciente pueda realizar sus actividades cotidianas. Mejoran la movilidad de la espalda, ya que dotan al paciente de seguridad en sus movimientos y reducen el miedo al notar la zona sujeta.
¿Cuándo utilizar una faja abdominal?
En casos de lumbociática, artrosis lumbar, osteoporosis, discopatía, osteomalacia, en un postoperatorio de hernia discal, así como aquellos casos de debilidad muscular, rehabilitación o procesos degenerativos, se indicada el uso de este tipo de elementos ortésicos.
Hay que tener en cuenta, que muchas personas sufren de manera habitual dolores de espalda a causa de su trabajo, obesidad o mala postura, y pueden necesitar un soporte o una ayuda extra como la faja lumbar para reducir el dolor. Por otra parte, saber utilizarlas con responsabilidad es muy importante, ya que su uso prolongado puede implicar un riesgo. Las fajas lumbares están indicadas para un uso temporal, y siempre que la persona no sufra algún otro tipo de afección que se pueda ver agravado.
Contraindicaciones en el uso de fajas lumbares
El uso de fajas lumbares, también presenta ciertas contraindicaciones que deben tenerse en cuenta. En primer lugar, no es recomendable utilizarlas de forma constante, ya que la musculatura de la espalda se podría acostumbrar a la contención que proporciona la faja y, por tanto, podrían verse alteradas sus funciones.
Además, pueden aportar una sensación de falsa seguridad y hacer que el paciente se confíe, llegando a realizar actividades o movimientos forzados. Es recomendable, además, que el uso de la faja lumbar vaya acompañado de otro tipo de tratamientos, por ejemplo, fisioterapia.